lunes, 21 de noviembre de 2011

El Apache Smith

  Hinchas, el periodismo y los dirigentes siempre tienen y tuvieron en el ojo de la tormenta a Carlos Tévez. Desde sus inicios en Boca y hasta su actualidad en el Manchester City el apache es un perseguido del mundo fútbol, parecido al acecho que sufría Winston Smith de parte del régimen del Gran Hermano en el libro 1984 de George Orwell.

Más momentos malos que buenos para Carlitos
   En el 2003 cuando Carlitos brillaba en el conjunto xeneise el equipo de la Rivera tenía que enfrentar al Milán por la Copa Intercontinental y cómo el delantero estaba citado para jugar el Mundial Sub – 20 con Argentina, no podía participar de la Copa. El jugador decidió ir ante la Justicia para que le posibiliten jugarla y esto no fue muy bien visto de parte del Periodismo y de la AFA que accedió a cederlo a cambio que retire la denuncia. En los festejos de ese Boca campeón Tévez se subió al travesaño de la cancha de Racing y se puso a cantar: “La Selección, la Selección, se va a la p… que lo parió”. Si el Periodismo ya lo había criticado por la negativa, después de esto se hizo un festín.

   En el 2009 y tras una pelea con su técnico Alex Férguson se va del Manchester United a su eterno rival, el Manchester City. “Era imposible discutir con el viejo, porque siempre salías perdiendo”, dijo Carlitos sobre Férguson y además agregó que “el viejo se cree el rey de Inglaterra”. Ante estas declaraciones el periodismo fue a agrandar el problema entre los dos. “No me preocupa si Tévez juega, en absoluto. El mejor jugador del Manchester City es Adebayor, que hizo goles en todos los partidos”, declaró el histórico DT del United sobre el jugador del City. La situación del ex Boca no era la mejor en Inglaterra. Era buscado por los hinchas del United y el periodismo.

   En la mitad del 2011 el apache erró el penal definitorio para Argentina en la Copa América frente a Uruguay y la paciencia de la hinchada Argentina con el hasta ahí jugador del pueblo se acabó. Una horda de silbidos lo despidió del estadio y el diario Olé al otro día tituló: “Que mal Tévez”. La relación se terminó. Encima también el presidente de la AFA Julio Grondona pidió que no se lo convoque más.
Hinchas del United y el City unidos contra el apache

  Para colmo cuando volvió a Inglaterra la amistad que mantenía con los fanáticos del City estaba en su peor momento tras que repitió en reiteradas ocasiones que se quería ir de ahí. Y se terminó de quebrar cuando en un partido frente al Bayern Munich por la Champions League se negó a entrar. Esto le valió una gran pelea mediática con Roberto Mancini y unió a los hinchas de los Ciudadanos y el United a una movida para reciclar las camisetas con su nombre. “Trash your Tévez shirt”, se llamó la iniciativa.      

   El Winston Smith del fútbol es Carlos Tévez. Perseguido por los medios, por varios dirigentes y por diversas personalidades del mundo deportivo como el Gran Hermano mismo lo persiguió a Smith.  

 
Tévez se niega entrar contra el Bayern

Anteriores a Messi

  Todo el mundo sabe que el Barcelona hoy en día es el mejor equipo que existe y que quizás el mejor de toda la historia. Allí juegan los argentinos Lionel Messi y Javier Mascherano. Pero también en un pasado jugaron jugadores de la talla de Juan Román Riquelme, Javier Saviola, Roberto Bonano y Gabriel Milito, entre los más conocidos. A continuación repasaremos la historia de cada uno de estos con la camiseta blaugrana.

El mariscal hace no mucho
  El caso más reciente es el del actual jugador de Independiente de Avellaneda, Milito. El mariscal volvió en el último mercado de pases al fútbol argentino tras no lograr la continuidad deseada en el Barça. Las lesiones fueron los principales motivos de esto. Se rompió los ligamentos cruzados el 29 de abril de 2008 en la semifinal de la Champions League frente al Manchester United. El siete de enero de 2010 volvió a las canchas pero nunca pudo afianzarse a una defensa liderada por Puyol y Piqué y por eso se le dio la carta de libertad.

  Uno que nunca se entendió bien por qué no pudo ganarse un lugar es Saviola. Llegó con 19 años y después de que paguen por él 36 millones de euros. El conejito jugó unas muy buenas primeras tres temporadas y justo cuando obtuvo la ciudadanía española el Barça lo cedió al Mónaco por un año. Volvió y nuevamente lo cedieron, pero esta vez al Sevilla donde fue campeón. Tras que Frank Rijkaard no lo use durante la temporada 2006/2007 el Barcelona no le renovó el contrato y se fue al Real Madrid.

   “Tito” Bonano llegó al Barcelona en 2001 con la edad de 30 años. Algo grande para llegar a un club de semejante magnitud. Fue uno de los peores momentos de la historia del Barça, donde no encontraba un buen funcionamiento y el Real Madrid ganaba todo lo que jugaba. Tras estar dos años allí se fue al Murcia. En Purogol-eter se encargaron de contar su paso por el equipo catalán.

Román con la blaugrana
   A uno que nunca el conjunto blaugrana lo dejó ser fue a Riquelme. De los mejores enganches que produjo el fútbol argentino en toda su historia. Llegó en 2002 a cambió de 26 millones de dólares brutos. Louis Van Gaal fue su técnico y en vez de ponerlo en su posición natural de enganche lo usaba como volante por la izquierda. Tras no convencerlo en ese lugar de la cancha el DT lo sacó de los titulares. Con la llegada de Ronaldinho el equipo tuvo que liberar cupo de extranjeros y así Román se fue a jugar al Villarreal.

Qué es de la vida de... Ricardo Álvarez

  Llegó al Inter de Italia a principio de temporada tras consagrarse campeón del Clausura con Vélez Sarfield sin lograr la continuidad que se requiere para jugar en el Viejo Continente. Alternaba cuando su equipo jugaba por la Copa Libertadores. Aunque su pase le costó al Inter 11 millones de euros y un contrato por cinco años (1,8 millones por temporada) todavía no consigue afianzarse en el “neroazzurro” y cuando le tocó vestir la camiseta de la Selección no rindió de la mejor manera.

  Su pretemporada en Italia arrancó con todo. Marcó un gol en su primer partido frente al Trentino y también clavó otros dos en el siguiente amistoso frente al Mezzocorona. “Estoy contento por estamos haciendo un buen trabajo. El equipo que ha parado Gasperini (el técnico) es muy rápido y requiere de la inmediata recuperación de la pelota. A mi el técnico me ha pedido que sea ordenado tácticamente y que apenas me encuentre con la pelota busque la verticalidad o de quedar en posición de gol”, declaró Ricky después del encuentro frente al Trentino.

  A pesar de que en la pretemporada el equipo arrasó, el comienzo del Calcio fue muy distinto. Álvarez alternaba entre jugar de entrada e ingresar desde el banco. Gasperini se fue tras perder 3 a 1 contra el Novara y llegó Claudio Ranieri a la dirección técnica. El cambio de DT no varió mucho las cosas para el ex Vélez y todavía sigue sin ganarse un puesto, con el que compite con el holandés Wesley Sneijder.

  En la Selección de Alejandro Sabella la cosa no fue muy diferente. Fue convocado para los primeros partidos de las eliminatorias frente a Chile y Venezuela. No disputó ni un minuto en ninguno de los dos encuentros. En la siguiente fecha volvió a ser citado, pero esta vez gracias a la baja por lesión de Ángel Di María, ya que en un principio no integraba la lista. “Ya estaba dada la lista y sabía que no iba a ir, pero ahora tengo que aprovecharlo al máximo. Si juego cinco o diez minutos tengo que rendir para seguir estando convocado”, dijo Álvarez enterado de la noticia. Frente a Bolivia jugó la mitad del partido (de mala manera) y contra Colombia no jugó y ya empezaron a lloverles varias críticas de parte de diversos medios.

   Así está planteado el presente del zurdo volante. Alterna en el Inter y no juega de la mejor manera en la Argentina. El Arsenal de Inglaterra (estuvo a punto de llevárselo antes que el conjunto Milanes), el Villarreal y el Málaga ya lo buscan para quedárselo a  partir de enero y su técnico no vería de mala gana un préstamo para que sume minutos.    

Mejores jugadas de Ricky

domingo, 20 de noviembre de 2011

Orgía de insultos en Cheroga para la Argentina

   Faltaban diez minutos para el comienzo del partido de la Selección frente a Bolivia y no había mucho movimiento en el bar – café Cheroga de San Clemente del Tuyú. El segundo piso estaba cerrado y las mesas del primero no estaban ocupadas en su totalidad. En la Argentina jugaban 10 jugadores que están en Europa de titulares. Este equipo no atrae demasiado.  


   Los primeros minutos del encuentro no les llamó la atención a casi ninguno de los que se encontraban en el bar. En dos mesas usaban sus respectivas notebooks y en otras hablaban entre los integrantes que tenían cada una de ellas.

   Quizás el momento más caliente del primer tiempo fue cuando el árbitro le anula el gol a Higuaín por no dar ley de la ventaja. Algunos se pararon de su silla para gritar el gol, pero al rato, cuando se dieron cuenta que habían cobrado falta, fue una lluvia de insultos para el referí. Aunque después uno tiró: “No importa, ahora la clava en el ángulo Messi”.

   La primera etapa, salvo ese desliz, fue muy tranquila. Los que se encontraban en el bar no le daban mucha importancia al partido. Tal es así que algunos se fueron en el entretiempo de allí. Pero, increíblemente, para la parte final llegaron alrededor de 20 personas al lugar.

   En el complemento la cosa fue distinta. El rápido gol de Bolivia tras el error de Demichelis fue un detonante de los peores adjetivos para el mismo jugador del Bayern Munich, Messi y Grondona. Ya el ambiente se había tornado hostil contra la Selección hasta que apareció el oportuno empate de Lavezzi. Aunque eso no calmó las aguas.

  Messi no apareció en su esplendor y los que se encontraban en Cheroga se lo hicieron saber. Pero igual el esposo de Evangelina Anderson, en todas las jugadas después de su error, sin importar que hacía las cosas bien o mal, fue el más puteado.

   El resto del partido fue así. Se vivió un clima de puteadas para casi todos los jugadores y uno de los televidentes hasta pidió que Diego Maradona vuelva a ser el técnico del seleccionado.

Espera por los jugadores

  La Selección Argentina se entrenaba en el predio de la Asociación del Fútbol Argentino en Ezeiza de cara a los partidos por eliminatorias frente a Bolivia y Colombia. Haciéndole honor a mi profesión como periodista decidí ir a intentar cubrir el entrenamiento.

   La entrada del lugar era magnífica para la vista. Un paredón que hacía resaltar los árboles del bosque en donde se encuentra ubicado. Un lugar verde, frondoso e ideal para pasar un domingo en familia. Los patrulleros y efectivos de seguridad que estaban en la puerta le ponían demasiada seriedad al bello paisaje.

   Muchos fuimos los que nos quedamos con las ganas de entrar al predio para ver a Messi, Agüero y compañía.  Aunque yo fui uno de los pocos periodistas que no pasaron por no estar acreditado. El resto de la gente eran familias e hinchas que querían ver a sus ídolos con el afán de conseguir autógrafos y fotos con ellos. Alrededor de 13, 14 personas eramos las que estábamos ahí.

   Algunas asomaban la cabeza para ver si veían venir a los jugadores y otras iban y les preguntaban a los policías cuanto faltaba para que aparezcan. Aunque mucho no se podía ver porque por la calle principal del predio había una curva que imposibilitaba la vista a las canchas de entrenamiento. La cara de emoción que tenían estos era impresionante.

   Si alguno de estos personajes consiguió su objetivo, no lo sé. Ya que al cansarme de esperar para que me dejen ingresar al predio y recibir todas respuestas negativas por no estas acreditado decidí emprender camino hacía mi casa. Ya aprendí que para la próxima vez me acredito o no voy.
    

sábado, 19 de noviembre de 2011

"Necesitaba cambiar de aire y me sirvió mucho"

  Ariel Cabral es un volante zurdo que juega en Vélez. Surgió de la cantera del conjunto de Liniers y en el 2010, tras no contar con la continuidad deseada, se fue a jugar un año al fútbol polaco, más precisamente en el Legia Varsovia, donde fue campeón. Cabral habló con CracksEnEuropa y contó cómo se vive el fútbol en Polonia y cómo lo viven allá.

En el Legia Varsovia

-¿Cómo tomaste la oferta?
- Bien. Yo necesitaba cambiar de aire. Me sirvió en lo personal para crecer. Pude ver otras cosas del fútbol. Fue un lindo paso a nivel internacional. Fue una gran experiencia y me sirvió muchísimo.

-¿Cómo hiciste con el idioma? ¿Fue una traba para llevarte con tus compañeros?
- Sí, la verdad es que fue una traba importante. Empecé a estudiar su idioma y también escuchaba. Intentaba hablando inglés. Tenía un amigo español y otro sudamericano que me ayudaban mucho. Con ellos tenía diálogo constante porque me ayudaban a traducirme qué me querían decir.
Cabra tiene continuidad en Vélez

-¿Cómo viste el fútbol polaco?
- Me sorprendió. La verdad es que es un fútbol muy competitivo. Tiene dos o tres equipos importantes. Yo estuve en uno de los más grandes. Es muy lindo todo, tienen un nivel muy bueno y eso me sirvió muchísimo.


-¿Cómo se vive el fútbol en Polonia? ¿Cómo acá o mucho menos?
- Te diría que como acá y más. La verdad es que son muy fanáticos, van a todas las canchas y cantan todo el partido. Muy parecido a la Argentina. Sobre todo en los clubes grandes, como en el que estuve yo.


-¿Te reconocían por la calle?
- ¡Sí! Jugaba seguido y la gente me saludaba. Yo estaba en la capital y es el equipo más grande. La gente es muy amable, me decían cosas en el idioma de ellos y yo me sentía contento, aunque no les entendía mucho jaja.

viernes, 18 de noviembre de 2011

De la desasón a la euforia

  Varios confrontes entre los hermanos Matías, Walter, Patricio y Fabio Cardoso en el partido en que Argentina le ganó el martes a Colombia como visitante por 2 a 1 por las eliminatorias. En el equipo argentino jugaron ocho jugadores titulares que militan en Europa.

  Apenas comenzado el encuentro, cuando el Seleccionado argentino manejaba la pelota sin profundidad, Walter y Pato se encargaron  de insultar con todos los adjetivos existentes a Alejandro Sabella, Lionel Messi y compañía. Mati y Fabio, en cambio, preferían mantenerse cautos y les bajaron un poco los decibeles a sus hermanos más grandes.
Messi encara a pesar de las faltas recibidas

   Los cuatro se mantuvieron de esa manera hasta que llegó al final del primer tiempo el gol de Colombia. Ahí los cuatro explotaron contra todos, sobre todo contra Messi con el típico la p… que te parió. A esa altura Matías empezó a hacer lo que acostumbra: pedir para que entre Sergio Agüero.

   Con el ingreso del Kun en el complemento y la levantada de nivel del equipo los Cardoso parecían más entusiasmados pero igual no les alcanzaba para estar felices con la actuación del equipo. Hasta que apareció el crack del Barça…

   Como una vez mostró una publicidad de una empresa de combustible para autos existen los hinchas que cambian de humor en un instante. “Que genio que sos Lio”, dijo Patricio tras el empate Argentino. Después de eso todos pasaron de ser “horribles” a ser “genios”, caso José Sosa.
Agüero, Messi e HIguaín

   Si estaban felices ahí, cómo explicarles como se puso Matías cuando el Kun clavó el 2 – 1. Empezó a gritar “Agüero, Agüero” junto con Fabio, a esa altura eran los únicos que quedaban frente al televisor, ya que el resto de los hermanos se fueron a trabajar en el auto.
   
   El partido terminó y los menores de los Cardoso, ya tranquilos con la remontada, se pusieron a jugar a la Playstation. Felices.
      



El resumen del partido